por Lautaro Muñoz - Foto: Agencia UNO (Archivo)
-¿Cómo toman las señales del equipo de Michelle Bachelet en cuanto a que la Asamblea Constituyente no sería el camino para hacer la nueva Constitución?
-A nosotros nos parece mal, en el sentido de que hemos reiterado una y otra vez la necesidad de tener una Constitución que sea construida por la ciudadanía de manera participativa. El problema del Congreso es que no es legítimo, porque está elegido con el sistema binominal. Tienes el caso de Marisela Santibáñez, que fue primera mayoría en su distrito (San Bernardo) y sin embargo no es diputada.
"La Asamblea Constituyente es la opción de elegir representantes para crear una nueva Constitución y que sean elegidos por sistema proporcional, es decir sin el binominal. Me parece una muy mala señal que la Nueva Mayoría, la Concertación, y el Gobierno entrante no se la jueguen por un sistema democrático y participativo, considerando además la poca participación política de la sociedad en general. La gente está en la calle o no está creyendo en las instituciones, por lo mismo es hora de generar una nueva Constitución participativamente".
-¿Qué opción tienen como PRO de hacer presión en torno a este asunto si no tienen parlamentarios?
-Acá no se trata de presionar, creemos en la vía institucional, por eso creamos un partido político. El tema es más bien explicarle y hacerle entender a la Presidenta de la República de la necesidad de construir una nueva Constitución con un sistema participativo. Ese es su compromiso, más que un compromiso de un Congreso elegido por el sistema binominal.
-Pero todo indica que el camino elegido es el Congreso.
-Pero hay dudas. La gente del movimiento Marca tu Voto te dice que esto no está zanjado en el futuro Gobierno. Yo estoy esperando el pronunciamiento de la Presidenta de la República. El día en que ella defina el mecanismo, podemos opinar. Ella es la jefa de Gobierno, los chilenos la eligieron mayoritariamente a ella y no a los parlamentarios. Por lo tanto, de ella depende. Ella tendrá que dar la cara por el mecanismo por el que opte, porque los proyectos se mandan por el Ejecutivo.
-¿Cree que la posibilidad de que los cambios los haga el Congreso abre el camino a un estallido social?
-Creo que todos los políticos hoy tienen que ser sumamente responsables en el lenguaje que se utiliza para no promover más disturbios ni un clima social difícil. Pero ciertamente que construir una nueva Constitución con un Congreso que fue electo con un sistema que fue definido en una época dictatorial, de forma antidemocrática, evidentemente genera un problema al momento de hablar de una nueva Constitución. Es poco viable hablar de una nueva Constitución cuando entre esos parlamentarios tienes a los que no son elegidos como primera mayoría y que son elegidos por el sistema binominal. No sería recomendable considerando la poca participación que hubo en primera y segunda vuelta, y la poca credibilidad que tiene los partidos y la clase política en general. Creo que sería una muy mala señal no generar un sistema participativo con cuotas de representatividad o por último llamar a un plebiscito. Hay muchas maneras más democráticas que entregar la labor a un Congreso elegido con sistema binominal.
-Pero las posiciones que planteaban Asamblea Constituyente en las elecciones pasadas, Marco, Claude y Roxana Miranda lograron un 15 por ciento entre los que votaron. ¿No es ese un mal pie para presionar?
-Creo que se mezclan cosas que no se deben mezclar. Las votaciones que obtiene los extra duopólicos no sólo es por sus posturas sobre Asamblea Constituyente. "Mutatis mutandis", no podemos decir por ejemplo que toda la gente que vota derecha está en contra del aborto terapéutico, porque sí sabemos que mucha gente y una corriente de derecha liberal están a favor.
"El movimiento Marca tu Voto logró un 8 por ciento de votos marcados, que ya es muy simbólico. Pero esto es más que un tema electoral. Cuando tenemos una crisis política en el sentido de que le gente no siente propia la Constitución, no siente propios a sus representantes, es lógico que se necesita una nueva Constitución, porque en Chile la Constitución data de la dictadura. La pregunta es entonces cómo hacemos la Constitución. Una posibilidad es llamar a un plebiscito. Ese fue un mecanismo que propuso Marco. Le pido a la Presidenta Bachelet que haga un plebiscito y que sean los chilenos los que deciden los mecanismos para cambiar la Constitución".
-¿Cómo toman las señales del equipo de Michelle Bachelet en cuanto a que la Asamblea Constituyente no sería el camino para hacer la nueva Constitución?
-A nosotros nos parece mal, en el sentido de que hemos reiterado una y otra vez la necesidad de tener una Constitución que sea construida por la ciudadanía de manera participativa. El problema del Congreso es que no es legítimo, porque está elegido con el sistema binominal. Tienes el caso de Marisela Santibáñez, que fue primera mayoría en su distrito (San Bernardo) y sin embargo no es diputada.
"La Asamblea Constituyente es la opción de elegir representantes para crear una nueva Constitución y que sean elegidos por sistema proporcional, es decir sin el binominal. Me parece una muy mala señal que la Nueva Mayoría, la Concertación, y el Gobierno entrante no se la jueguen por un sistema democrático y participativo, considerando además la poca participación política de la sociedad en general. La gente está en la calle o no está creyendo en las instituciones, por lo mismo es hora de generar una nueva Constitución participativamente".
-¿Qué opción tienen como PRO de hacer presión en torno a este asunto si no tienen parlamentarios?
-Acá no se trata de presionar, creemos en la vía institucional, por eso creamos un partido político. El tema es más bien explicarle y hacerle entender a la Presidenta de la República de la necesidad de construir una nueva Constitución con un sistema participativo. Ese es su compromiso, más que un compromiso de un Congreso elegido por el sistema binominal.
-Pero todo indica que el camino elegido es el Congreso.
-Pero hay dudas. La gente del movimiento Marca tu Voto te dice que esto no está zanjado en el futuro Gobierno. Yo estoy esperando el pronunciamiento de la Presidenta de la República. El día en que ella defina el mecanismo, podemos opinar. Ella es la jefa de Gobierno, los chilenos la eligieron mayoritariamente a ella y no a los parlamentarios. Por lo tanto, de ella depende. Ella tendrá que dar la cara por el mecanismo por el que opte, porque los proyectos se mandan por el Ejecutivo.
-¿Cree que la posibilidad de que los cambios los haga el Congreso abre el camino a un estallido social?
-Creo que todos los políticos hoy tienen que ser sumamente responsables en el lenguaje que se utiliza para no promover más disturbios ni un clima social difícil. Pero ciertamente que construir una nueva Constitución con un Congreso que fue electo con un sistema que fue definido en una época dictatorial, de forma antidemocrática, evidentemente genera un problema al momento de hablar de una nueva Constitución. Es poco viable hablar de una nueva Constitución cuando entre esos parlamentarios tienes a los que no son elegidos como primera mayoría y que son elegidos por el sistema binominal. No sería recomendable considerando la poca participación que hubo en primera y segunda vuelta, y la poca credibilidad que tiene los partidos y la clase política en general. Creo que sería una muy mala señal no generar un sistema participativo con cuotas de representatividad o por último llamar a un plebiscito. Hay muchas maneras más democráticas que entregar la labor a un Congreso elegido con sistema binominal.
-Pero las posiciones que planteaban Asamblea Constituyente en las elecciones pasadas, Marco, Claude y Roxana Miranda lograron un 15 por ciento entre los que votaron. ¿No es ese un mal pie para presionar?
-Creo que se mezclan cosas que no se deben mezclar. Las votaciones que obtiene los extra duopólicos no sólo es por sus posturas sobre Asamblea Constituyente. "Mutatis mutandis", no podemos decir por ejemplo que toda la gente que vota derecha está en contra del aborto terapéutico, porque sí sabemos que mucha gente y una corriente de derecha liberal están a favor.
"El movimiento Marca tu Voto logró un 8 por ciento de votos marcados, que ya es muy simbólico. Pero esto es más que un tema electoral. Cuando tenemos una crisis política en el sentido de que le gente no siente propia la Constitución, no siente propios a sus representantes, es lógico que se necesita una nueva Constitución, porque en Chile la Constitución data de la dictadura. La pregunta es entonces cómo hacemos la Constitución. Una posibilidad es llamar a un plebiscito. Ese fue un mecanismo que propuso Marco. Le pido a la Presidenta Bachelet que haga un plebiscito y que sean los chilenos los que deciden los mecanismos para cambiar la Constitución".
"EL 11 % DE AHORA VALE MÁS"
-Se habla hoy de autocrítica, especialmente en la Alianza. ¿En el PRO no hay una autocrítica por lo que sucedió? Pretendían ganarle a la derecha y Marco obtuvo la mitad de los votos de la elección anterior.
-Hay varias lecturas. Nosotros primero hacemos la lectura optimista de decir que el 11 por ciento que obtuvo Marco en esta ocasión de alguna forma vale más ideológicamente que el 20 por ciento que obtuvo la vez pasada. Porque ese fue un porcentaje de protesta. Este es un 11 por ciento que es propio, porque es de propuesta.
"Sí hacemos una autocrítica respecto de que pasó con muchas otras candidaturas extra duopolio. Y en ese sentido hemos trabajado desde el día uno para tender puentes y trabajar en forma común con otros partidos. Estamos en ese ejercicio y en el ejercicio de generar nuevos cuadros. Entendemos que somos un partido joven y que obviamente tenemos muchas dificultades".
-Pero hubo agrupaciones más nuevas como la Izquierda Autónoma que rompió el binominal o el mismo senador Carlos Bianchi.
-Está comparando cosas que no son comparables, por ejemplo lo que pasa con Revolución Democrática.
-No hablo de Revolución Democrática, hablo de Izquierda Autónoma que eligió a Gabriel Boric.
-Nosotros nos omitimos por Boric, también por Pancho Figueroa en Providencia. No significa para nada que ganara Boric por esa omisión. Significa, sin embargo, que lamentablemente en Chile el sistema binominal no favorece la participación de múltiples candidatos en las elecciones parlamentarias. Volviendo al caso de Giorgio Jackson, obviamente es muy legítima su elección y me alegro que nuevos liderazgos salgan también, pero lo cierto es que no compitió con los candidatos de la Concertación.
-Boric compitió con Mario Schilling, que fue apoyado por el PRO, y le fue bastante mal.
-Pero no compitió con dos candidatos de una de las dos coaliciones más importantes de Chile. Comparemos lo comparable. Somos una coalición que en este minuto tememos un diputado, tenemos cores, tenemos 50 concejales, tenemos 10 alcaldes y estamos muy contentos con eso. Evidentemente lo que queda por hacer es muchísimo. Pero no se me puede comparar con coaliciones que llevan 20 años en el poder.
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