lunes, 8 de mayo de 2017

El juego de tronos de los delitos tributarios

La pelea para llevar a los políticos a la justicia

El Servicio de Impuestos Internos puso las trabas para paralizar las investigaciones por financiamiento ilegal de la política y con un alto costo sobre su imagen. Ya no es solo la opinión pública la que condena la decisión, sino que también los fiscales, jueces y algunos diputados.


Por Equipo Cambio21


Hay un conflicto abierto entre el Ministerio Público y el Servicio de Impuestos Internos (SII) sobre las facultades para investigar los delitos tributarios. Si bien es el SII el que tiene el dominio sobre el tema, los casos de financiamiento ilegal de la política demostraron que las capacidades no son suficientes para indagar los casos particulares.

A lo anterior se le agregan las supuestas presiones que recibió el organismo para ralentizar o paralizar algunas aristas. Esto luego que el SII decidiera no presentar nuevas denuncias o querellas en la arista SQM.

La primera crítica vino del fiscal oriente Carlos Gajardo, pasando después al fiscal nacional Jorge Abbott, quien también lamentó la paralización de acciones. La fiscalía solo puede empezar sus investigaciones con la denuncia del SII.

El último en sumarse es el jefe de la Fiscalía Metropolitana Oriente, Manuel Guerra, quien señaló que "el caso Penta, Soquimich, Corpesca, la recuperación de dinero que se ha efectuado, de hartos miles de millones de pesos, no se debió a la actitud fiscalizadora del Servicio de Impuestos Internos, sino que a la acción del Ministerio Público".

"Si eso no le gusta al señor director (Barraza) o lo considera una falta de respeto, eso es problema de él. Nosotros podríamos decir lo mismo de lo que él dijo en el Congreso, (...) cuando dice que un 72 por ciento de los casos no tiene formalización y que poco menos eso fundamentaría que el Ministerio Público quizás no tendría la capacidad para investigar las denuncias o querellas del Servicio de Impuestos Internos", recalcó el fiscal.

Choque de poderes

El conflicto también llegó hasta el Congreso donde los diputados ya manifestaron su malestar por las trabas en las investigaciones. El miembro de la comisión de Hacienda, diputado Alejandro Santana, dijo que hay acuerdo en que deberían ser los fiscales los que investiguen si hay mérito, sin embargo, la ambigüedad de la ley actual es la que provocó el problema presente.

"El punto es que el SII ante igual situación ha tomado criterios distintos, ese es el foco. Lo que hay que resolver es el origen. Cuando una causa inicia desde lo penal lo tiene que revisar el Ministerio de Publico, entonces, el problema no es quien investiga, sino cómo resolver hechos distintos en casos similares, cómo evitar estas ambigüedades".

Es por esto que el diputado plantea que se necesita una reforma en que "el SII tiene que tener una transformación a organismo independiente como el Banco Central, que tenga un objetivo claro y definido".

Incluso el presidente de la Corte Suprema, Hugo Dolmestch, propuso que sea el Poder Judicial quien zanje la discusión sobre quién debe interponer las querellas.

Para el abogado querellante en los casos Penta y SQM Pedro Orthusteguy, no hay espacio a duda, es el Ministerio Público el que debe investigar.

"La pregunta es si el inicio de la investigación puede verse inhibida por el actuar de una sola persona en forma discrecional. Nos parece que la respuesta en pro del interés público es que eso no debiera ocurrir. Para eso el Estado invierte millones de dólares anualmente en una institución autónoma como el Ministerio Público".

Sobre la propuesta de Dolmestch, el abogado la consideró "innecesaria". "Es complejizar algo fácil. El que investiga los delitos en Chile es la Fiscalía y no debe tener limitaciones de ninguna especie", agregó.

Además, para el también es presidente de la asociación de fiscales, "el Ministerio Público tiene la facultad exclusiva de investigar los hechos que revisten carácter de delitos y creo que no debe existir ningún delito fuera de su alcance como ocurre hoy con los delitos tributarios, electorales y de colusión, los que justamente causan mayor preocupación pública".

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