SER UN EXILIADO

Saludos a todos,

Escrito por el editor, Don Juan Carlos.

Con el debido respeto, el exilio, destierro o expatriación es la separación, voluntaria o forzosa, de una persona de la tierra a la que pertenece, producida generalmente por motivos políticos, económicos o de supervivencia. En Chile, tras el cruento golpe de Estado de Pinochet (1973), miles de compatriotas y familias debieron exiliarse forzosamente para evitar ser encarcelados, torturados y/o asesinados o para evitar un atentando, una masacre, un secuestro, una amenaza, la desaparición de un ser querido o su asesinato fueron algunos de los hechos que llevaron a tomar la decisión de salir del país para defender el derecho a la vida.

Cabe destacar que el exilio, es algo doloroso porque no es solamente partir de su país hacia otras latitudes y dejar a sus raíces, costumbres y familias sí no por qué se está expuesto a no tener una verdadera identidad donde uno se establece.

Según mi opinión, a partir de entonces las historias de vida de quienes están en el exilio están atravesadas por múltiples violencias y hechos traumáticos que han causado una ruptura en sus condiciones de seguridad y en sus garantías para quedarse en su país. La reflexión sobre el exilio ha estado centrada sobre todo en la experiencia del retorno, en el sentimiento de desarraigo profundo de la identidad individual y colectiva que ha hecho del exilio una experiencia traumática.

Sin embargo, más frustrante aún, es regresar con los años a la patria con alegría y descubrir que al querer insertarse en el campo laboral se nos niega la oportunidad de trabajar y se nos juzga por el pasado que dentro de todo este contexto, nos llevaron a salir al exilio.

¡LA PATRIA ES PRIMERO!

4 COMENTARIOS

Jorge Gutierrez: El Exilio es lo peor que le puede suceder al ser humano. Tuve hermanos exiliados mi mamá sufrió mucho por no poder ver a sus hijos en Navidad y Año Nuevo. Exiliar a personas de Edad era terrible, otros idiomas, mucho frío en países europeos. La comida era diferente a la de su país muchas de estar personas murieron de pena. Además nadie tiene derecho a exiliar a ningún ser humano.

JuanCarlosCJ: Hermano, aprecio muchísimo su opinión, los que tuvimos que abandonar nuestra patria obligados por los decretos de ley de la cruenta dictadura de Pinochet, después de tenernos años como prisioneros políticos en sus mazmorras, dejamos atrás… trozos de dignidad. Muchas gracias.

Patrick Cruciano: Tiene toda la razón hermano. En mi caso estuve a punto de partir al exilio a Bélgica porque era perseguido por ser dirigente poblacional, funcionario y estudiante de Filosofía del Pedagógico de la U. de Chile de la cual salí exonerado. El Padre Rafael Maroto me gestionó mi salida. Me costaron detenciones quedarme, pero resistí. Tenía dos hijitas pequeñas y mi esposa las que me retuvieron quedarme. Tal cual como tú lo describes habría sido muy doloroso para mí estar lejos de mi naciente familia. Hoy, él solo imaginarme, me emociona. Un abrazo hermano.

JuanCarlosCJ: Hermano mío. El Chile que hoy existe, fue destruido por la dictadura. No hay voluntad política de avanzar en un sistema de seguridad y justicia social de parte de los gobiernos democráticos de Chile. De los paladines de la generación de los 70”s solo quedan, trozos de dignidad. Esforzaos cada día y cada hora en aliviar las cargas del próximo, y al propio tiempo decid dulcemente: Lo hago en Su nombre a fin de ayudarle en Su labor. “Si el grano de trigo no muere, no podrá resucitar”. Gracias.