La Casa Blanca, en Washington. El Senado de Estados Unidos aprobó el jueves un proyecto de ley de defensa que congela parte de los fondos de ayuda otorgados a Pakistán, impone nuevas y más duras sanciones financieras para Irán, así como la prisión indefinida para sospechosos de terrorismo
Por Jewel Samad | AFP – Hace 2 horas 9 minutos
El Senado de Estados Unidos aprobó el jueves un proyecto de ley de defensa que congela parte de los fondos de ayuda otorgados a Pakistán, impone nuevas y más duras sanciones financieras para Irán, así como la prisión indefinida para sospechosos de terrorismo.
La ley de Autorización de Defensa por 662.000 millones de dólares y que incluye esas disposiciones fue aprobado por 86 votos contra 13 en un Senado de mayoría demócrata, después de que el presidente Barack Obama dejara de lado una amenaza de veto.
El miércoles, con la bendición de la Casa Blanca, la Cámara de Representantes había aprobado por 283 contra 136 votos el proyecto de ley, que incluye congelar parte de la ayuda concedida a Pakistán para la lucha antiterrorista, duras sanciones contra el Banco Central de Irán y obstáculos al cierre de la prisión en su base de la Bahía de Guantánamo, en la isla de Cuba.
El mismo jueves, Pakistán criticó con furia las intenciones estadounidenses de congelar la ayuda, en el marco de las difíciles relaciones entre ambos países, que se complicaron aún más tras la muerte el mes pasado de 24 soldados paquistaníes en un ataque aéreo de EEUU, lo que llevó a Islamabad a cerrar rutas clave de abastecimiento de la OTAN hacia Afganistán. La embajada de Islamabad en Washington acusó el jueves en una rueda de prensa que el ataque aéreo estadounidense fue deliberado.
En tanto, el portavoz del ministerio de Relaciones Exteriores paquistaní Abdul Basit, dijo que "creemos que el movimiento en el Congreso de EEUU no está basado en hechos y adopta una visión estrecha de la situación en su conjunto; de ahí, que las conclusiones incorrectas sean inevitables".
El proyecto aprobado también aborda nuevas sanciones contra Irán, con el objetivo de aislar el Banco Central de Teherán del sistema global financiero y así intentar forzar a la república islámica a congelar su criticado programa nuclear, que las potencias occidentales sospechan tiene fines militares.
Se pretende obligar a las instituciones financieras a escoger entre hacer negocios con ese banco central -por el cual Irán vende su petróleo para obtener divisas- o hacer negocios con bancos estadounidenses.
En la misma iniciativa aprobada por los congresistas también se estipula que los combatientes de Al Qaeda que conspiren o ataquen objetivos estadounidenses sean retenidos bajo custodia militar, no civil, sujeto a una exoneración presidencial.
La ley exime a los ciudadanos estadounidenses de ese destino, pero deja en manos del Tribunal Supremo de Justicia o se futuros presidentes decidir si aquellos que se unieron a Al Qaeda o grupos afiliados pueden ser retenidos indefinidamente sin juicio.
Los grupos defensores de las libertades civiles denunciaron la capacidad del gobierno de mantener de facto presos a presuntos extremistas sin cargos hasta el final de la "guerra contra el terrorismo" declarada tras los atentados del 11 de septiembre de 2011.
Fuera de estos tópicos candentes, la nueva legislación pide lazos más cercanos a nivel militar con Georgia, incluyendo la venta de armas, para ayudar en la defensa de ese país, que sostuvo una breve guerra con Rusia en 2008.
También se incluyó una enmienda que asegura que EEUU no traspasará a Moscú información sensible sobre el sistema de defensa de misiles local, una medida para persuadir a los senadores que han estado bloqueando el nombramiento pendiente de Michael McFaul como embajador estadounidense en Rusia.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario