Por Por Neil Connor | AFP – Hace 58 minutosLas manifestaciones antijaponesas en China fueron alentadas por las autoridades, dijo este jueves el artista disidente Ai Weiwei, quien filmó a manifestantes que atacaban al coche del embajador estadounidense, causando daños menores y obligando a reaccionar al Departamento de Estado.
Este artista, célebre en el mundo entero, se encontraba el martes en el apartamento de un amigo situado cerca de la embajada de Estados Unidos, adyacente a la de Japón, cuando vio a los manifestantes y comenzó a filmar la escena, según declaró a la AFP.
Ai Weiwei dijo que se sintió "sorprendido" el martes al ver que unos 50 manifestantes abandonaban súbitamente el mitin ante la embajada nipona para bloquear al automóvil del embajador de Estados Unidos, Gary Locke, quien se disponía a entrar a su embajada.
Los manifestantes dañaron el banderín de la limusina antes de lanzar algunos proyectiles contra el auto. Los policías chinos intervinieron casi inmediatamente para proteger al vehículo, que se alejó acelerando, antes de entrar a la embajada por otra puerta. El embajador norteamericano declaró a la prensa que "todo terminó en algunos minutos", agregando que "nunca se había sentido en peligro". En el video de Ai Weiwei, el incidente dura dos minutos.
"Yo estaba muy sorprendido porque todo el mundo pudo constatar que toda la manifestación había sido preparada por las autoridades", señaló por teléfono Ai Weiwei, un artista que pasó 81 días en la cárcel el año pasado por haber manifestado el deseo de que hubiera una nueva "primavera china" después de la "primavera árabe".
El martes se realizaron manifestaciones en toda China para protestar contra la decisión japonesa de nacionalizar a las islas Senkaku, reivindicadas con el nombre de Diaoyu por China, en el Mar de China Oriental. El miércoles, el embajador Gary Locke se reunió con responsables de la cancillería china para "pedirles que hicieran todo lo posible para garantizar la seguridad de (nuestro) personal".
El ministerio de Relaciones Exteriores chino "prometió un nuevo examen completo y medidas en términos de procedimientos y protocolo para que un incidente de ese tipo no se vuelva a producir", agregó Locke. El Departamento de Estado norteamericano reaccionó declarando que había "señalado su preocupación" a las autoridades chinas. Según Ai Weiwei, las autoridades chinas fueron "ingenuas" al tratar de manipular a la opinión pública china de una forma según él nunca vista desde la Revolución Cultural (1966-76).
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