CRISIS EN UCRANIA »
La medida, anunciada en Bruselas por Christine Lagarde, se extenderá durante cuatro años
La cumbre para la paz en Ucrania logra un acuerdo de alto el fuego
BELÉN DOMÍNGUEZ CEBRIÁN Bruselas 12 FEB 2015 - 13:48 CET
Ucrania y Rusia acaban de anunciar este jueves un acuerdo de paz en Minsk (Bielorrusia) y con ello, la presidenta del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, ha prometido una ayuda económica de 17.500 millones de dólares (15.500 millones de euros) para Kiev a cambio de que el Gobierno ucranio haga considerables reformas: revisar la política energética, recortar el gasto del Estado y reducir la burocracia.
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“Es un programa ambicioso, duro y que conlleva riesgos”, ha dicho la directiva francesa sobre este rescate, “pero es también realista y representará un punto de inflexión en Ucrania”, continuó. Lagarde se refirió a las tensiones geopolíticas que “afectan a la confianza de los inversores en el país”.
Minutos más tarde, el primer ministro ucranio, Arseny Yatseniuk, declaró que es "muy difícil" que esas reformas propuestas por el FMI acaben con uno de los lastres que inestabiliza el país desde hace años, la corrupción. Lagarde, sin embargo, ha aplaudido el esfuerzo por combatirla. Yatseniuk, durante una comparecencia en Kiev junto a otros funcionarios del FMI, se mostró decepcionado porque esperaba que este paquete de ayudas fuera mayor, concretamente de 22.000 millones de euros.
Lagarde ha explicado que esta ayuda —que sumada a otras anteriores hace un total de 35.000 millones de euros— ha sido impulsada porque Ucrania por fin “ha demostrado su compromiso con estos ajustes” en sectores clave, como una fuerte “disciplina fiscal” (en 2014 tuvo un déficit del 4,6% del PIB frente a un pronóstico del 5,8%).
El Gobierno de Yanukóvich comenzó en 2014 una travesía de tijeretazos para satisfacer al FMI y poder disponer así de la liquidez que Lagarde prometía. El Ejecutivo ucranio incrementó la recaudación fiscal, con tasas extra incluso para el consumo de tabaco y alcohol, y subió el precio del gas ruso (de 480 dólares los mil metros cúbicos, en vez de los 280 que costaban anteriormente), entre otras medidas estructurales.
La ayuda de este jueves pretende también posicionar al FMI en el papel de líder en la ayuda exterior a Ucrania, que hace un total de poco más de 35.000 millones de euros. “Esta partida estará también apoyada por otras fuentes —bilaterales y multilaterales— de financiación”, ha especificado.
Ucrania está sumida desde hace poco más de un año en una guerra no declarada con Rusia por la soberanía de las regiones separatistas de Lugansk y Donetsk, al este del país. El conflicto armado ha dejado cerca de 6.000 muertos, según la ONU. Los líderes de ambos lados, arropados por la mediación de la OSCE y la UE —con el presidente Hollande y la canciller alemana, Angela Merkel, a la cabeza— intentaban desde hace semanas acercar posturas para llegar a una solución diplomática del conflicto, que este jueves se ha traducido en un alto el fuego que, según el presidente ruso, Vladímir Putin, entrará en vigor a las 00.00 del 15 de este mes.
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