Bolivia y el mar

Combate Naval de Iquique

Señor Editor:

Bolivia volvió a la carga en Madrid por el tema del mar y amenazando con llevar el tema a La Haya.

Desde el punto de vista humano es volver a Aristóteles. La política es, al final, un problema emocional; no se puede convencer con la razón, es necesario convencer en la emoción y, al parecer, aquí podría estar una nueva derivada. Bolivia no entiende las razones del derecho internacional y apela a la emoción. Bolivia desconoce lo actuado por el Estado boliviano en su momento y acusa presión. Bolivia no entiende que ellos propusieron la guerra y perdieron la apuesta. Es más, arrastraron a Perú, que también nos tiene en La Haya.

Cuando Bolivia entienda que la comunidad internacional está regida, nos guste o no, por un derecho internacional aceptado por todos, podrá mirar hacia el interior de su país, redescubrir sus riquezas y avanzar en el camino del desarrollo. Mientras esté sentada en su cerro más alto, mirando al mar y soñando en desarrollarse en un territorio que no le pertenece, nunca podrá avanzar en un mundo que le ofrece la posibilidad de crecer y para el que tiene riquezas que ese mundo requiere.

Jorge Sanz J.
Profesor de Geopolítica Universidad del Desarrollo