TESTIMONIO: "Rompiendo el silencio"

                                TESTIMONIOS

De: Emilio Rivera
Tu eras, camarada Salvador, la gran alternativa para sepultar este fósil que continua alimentándose de la sangre de la clase trabajadora, y que en este periodo brama por auxilio. Los que acreditamos en un mundo diferente colocamos en tu pecho la gloria que te mereces. Y para los caídos, salud!
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De: Freddy Pacheco León, PhD
Heredia, Costa Rica

Para entonces era un estudiante de posgrado en el Departamento de Bioquímica de la Universidad de Chile. Llegado de Costa Rica no vislumbraba siquiera la posibilidad de un rompimiento del gobierno constitucional de Salvado Allende, por los militares asesinos y los carabineros “rastreros” financiados por la CIA. ¡Esa posibilidad parecía tan irreal que hasta chistes se hacían alrededor de ella! Pero esa mañana del martes 11 de setiembre de 1973 sustituyeron las sonrisas por los sollozos y las lágrimas infaltables. La sangre tiñó el Mapocho y las alamedas de Santiago y otras ciudades. Los milicos mataron la ilusión de un pueblo que soñaba por un mañana pleno de justicia y que todavía espera por alcanzar la estrella que señalara Neruda.
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