The Clinic Online 04 Junio, 2015
El gigantesco vórtice en que parece haberse convertido la corrupción en Chile tiene más que preocupada a la Presidenta Michelle Bachelet, quien -de gira en Italia- conversó del hecho con el diario La Repubblica.
La Jefa de Estado dijo a este medio que “la corrupción en los negocios y en la política es un desafío global a las modernas democracias. La desconfianza en el sistema político en la actividad privada se ha reducido de manera sensible”.
Luego de ese comentario, al Mandataria tocó la situación país, al sostener que “en Chile también hemos tenido casos recientes muy graves que involucraron a mi gobierno y han sido muy dolorosos para mí. Por eso guié personalmente la realización de una nueva agenda sobre transparencia en el sector estatal y de gobierno con mayores castigos para los delitos de corrupción”.
Bachelet también aprovechó la instancia para destacar el proceso de reformas que impulsa su administración.
“En las últimas tres décadas mi país vivió un fuerte proceso de modernización. Pero fue una revolución económica y tecnológica incompleta (…) Las relaciones sociales, laborales y políticas, como los derechos de las personas y las instituciones políticas, no se han modernizado con la misma rapidez. Los ciudadanos sufrieron estos atrasos y eso explica el malestar social de estos meses”.
Al respecto, la Mandataria recalcó que “renovar las bases sociales, políticas y económicas del desarrollo para avanzar en una modernización socialmente inclusiva es lo que está a la base de nuestro programa de gobierno”.
Esta semana, antes de partir a Italia donde sostendrá un encuentro con el papa Francisco en Roma, Bachelet debió hacer frente a los resultados de la encuesta Adimark de mayo, estudio que arrojó que nivel su de popularidad alcanzó tal punto de deterioro que casi se acerca a los peores números que tuvo Sebastián Piñera durante su mandato.
Asimismo, el mismo día en que se dio a conocer esta encuesta, la Mandataria se sinceró en radio Cooperativa acerca de las circunstancias acaecidas durante el periodo de precampaña.
La Mandataria expuso que “yo no vine a hacer precampaña, yo vine a hacer campaña, yo tomé la decisión entre fines de febrero… en febrero digamos, de que finalmente volvía a Chile. Fue una decisión súper dolorosa, yo estaba en un trabajo precioso, muy comprometido con las mujeres”.
En ese sentido, subrayó que “nunca ni instruí, ni fui informada, ni autoricé ningún mecanismo de financiamiento para una precandidatura, nunca, jamás, nunca fui informada de eso”.
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