Jesús Murillo, fiscal general de la República, y Ángel Aguirre, gobernador de Guerrero, dan cuenta de las detenciones
Según el procurador general de la República, el caso está completamente resuelto con la detención de seis personas que «aceptaron plenamente su participación en los hechos»
MANUEL M. CASCANTE / CORRESPONSAL EN CIUDAD DE MÉXICO
Día 15/02/2013 - 02.45h
Apenas unos minutos antes de que el presidente de México, Enrique Peña Nieto, anunciara su Política Nacional Turística, el procurador (fiscal) general de la República, Jesús Murillo Karam, daba a conocer que la violación en Acapulco de seis españolas «quedó resuelta» con la captura de seis individuos «completamente confesos». Seis hombres, de entre 16 y 30 años, que «aceptaron plenamente su participación» en los hechos, que narraron un relato «pleno de lo ocurrido» y a quienes se les decomisaron algunos de los objetos robados. «Hay pruebas periciales que demuestran la culpabilidad de los detenidos. Su participación está plenamente acreditada». Aún falta por detener a otro sospechoso, plenamente identificado.
Según el diario «Milenio», que tuvo acceso al expediente, los imputados forman parte de una banda dedicada al robo, la venta de droga, la extorsión y el secuestro, pero son «poco profesionales» y cometieron muchos errores, como dejar sus huellas dactilares por todas partes. El día de los hechos, ingirieron alcohol y, algunos de ellos, también estupefacientes. La idea original, según la investigación, era asaltar una casa próxima a la que ocupaban las españolas junto a seis compatriotas varones y una ciudadana mexicana, pero desistieron porque encontraron vigilancia.
Sus capturas se produjeron entre el martes y el miércoles, por lo cual no tendrían relación con otros sospechosos que el pasado fin de semana eran identificados tanto por las españolas como por otra mujer que fue agredida en noviembre.
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